Las orugas (fase de larva) están cubiertas de pelos urticantes que se desprenden y flotan en el aire, por lo que pueden provocar irritación en oídos, nariz y garganta en los seres humanos, así como intensas reacciones alérgicas. La sustancia que le confiere esta capacidad urticante es una toxina termolábil denominada Thaumatopina.
Es la plaga más importante de los pinares mediterráneos. Debe su nombre de "Procesionaria" a que se desplaza en grupo de forma alineada, a modo de procesión.
La Procesionaria del pino produce dos tipos de daños:
1. Pérdida de acículas: Las orugas se alimentan en invierno de las acículas de Pinos y Cedros, provocando que éstas se sequen y caigan.
2. Urticarias y alergias
Ciclo biológico
ResponderEliminarEn verano aparecen las mariposas de Procesionarias del pino; se aparean y la hembra pone los huevos en las acículas de los árboles (así se llaman las hojas de las Coníferas).
Las orugas nacen a los 30 ó 40 días de la puesta, es decir, entre mediados de septiembre y mediados de octubre (Hemisferio Norte).
Las orugas construyen nidos o bolsones de seda que les sirven de refugio para pasar los fríos del invierno.
Cuando llega la primavera, o finalizando el invierno (desde febrero a primeros de abril), las orugas descienden en fila al suelo, de ahí el nombre de Procesionaria; se entierran y crisalidan dentro de un capullo (ver foto superior de la crisálida).
De las crisálidas surgen en verano las mariposas que se aparearán dando comienzo a un nuevo ciclo.
Aquí dejo otro insecto del que hablamos en clase.
ResponderEliminarEl pececillo de plata, también conocido como la lepisma de la harina, la lepisma del azúcar, traza o la sardineta, es una especie de insecto tisanuro de la familia Lepismatidae, ágil y con una fuerte fototaxia negativa (huye de la luz), lo que hace rara su observación. El nombre de la especie deriva del brillo gris metálico de su cuerpo. Las lepismas viven de materias vegetales diversas, como moho, papel y alimentos amilosos (con almidón), como la cola de encuadernar libros o el apresto para la ropa.
fuente
Los métodos de control
ResponderEliminarExisten numerosos métodos de control que pueden reducir las poblaciones de procesionaria y mantenerlas en bajos niveles de infestación. No obstante, hay que tener en cuenta que ciertas condiciones ambientales favorables al desarrollo de la plaga no pueden ser modificadas, pudiendo producirse reinfestaciones. El método elegido deberá ocasionar el menor impacto posible sobre el medio.
-Tratamientos químicos masivos: Se realizan con inhibidores del crecimiento o con insecticidas microbiológicos. Estos han dado mejores resultados.
-Trampas de feromonas: la síntesis de la feromona sexual de la hembra, ha permitido utilizar trampas para la captura masiva de machos, manteniendo bajos los niveles de la población del insecto.
-La destrucción de los bolsones: por medios físicos o químicos. Entre los primeros se encuentran el corte y posterior aplastamiento o quema, una vez que estén bien formados.
En España se han identificado numerosos parásitos, depredadores y enfermedades que, ayudan a mantener bajos los niveles de población de procesionaria.
Las orugas son atacadas por hormigas, cigarras, avispas y diversos parásitos. Sus depredadores más efectivos son las aves paseriformes, en concreto los carboneros y los herrerillos, dos aves insectívoras especialmente voraces con estas orugas.